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Desde tiempos inmemoriales, las Velas han sido testigo de la Evolución Humana, iluminando los caminos oscuros y preservando momentos sagrados.
Su historia es tan antigua y profunda como las civilizaciones que las idearon y utilizaron.
Historia y Orígenes
Las primeras menciones de las Velas nos llevan a la Civilización Egipcia, donde por allá en los siglos XIII y XIV, se utilizaban ramas impregnadas con grasa de animales para crear una fuente primigenia de luz.
Sin embargo, la transición hacia lo que podemos identificar como Vela moderna llegó en la Edad Media.
La cera de abeja y el sebo se convirtieron en los ingredientes predilectos para su fabricación.
Posteriormente, en el siglo XVIII, la esperma de ballena revolucionó la luminosidad de estas fuentes de luz.
Pero fue con la aparición de la parafina, en el siglo XIX tras el descubrimiento del petróleo, cuando se consolidó la fabricación contemporánea de velas.
Más Allá de la Iluminación
Si bien en sus albores las Velas servían esencialmente como fuente de luz, con el tiempo adquirieron un significado más profundo. Su presencia se ha convertido en símbolo de diversas intenciones y rituales:
- Luz en la oscuridad para crear ambientes íntimos y románticos.
- Herramientas esenciales en rituales mágicos y espirituales.
- Canales para movilizar y direccionar energías con propósitos específicos, desde la salud hasta la prosperidad.
El Alma de la Vela
El mundo esotérico ve en la Vela un reflejo de nuestra esencia y nuestra conexión con lo divino:
- Cera: Simboliza nuestro cuerpo físico, lo tangible y terrenal.
- Pabilo: Representa la mente, el puente entre lo material y lo espiritual.
- Llama: Encarna el espíritu, la chispa divina que reside en nosotros.
Las Velas también son un espejo de los elementos primordiales que componen el universo:
- Luz (Llama): El fuego que transforma y purifica.
- Cera: La tierra, base y sustento.
- Cera Líquida: El agua, flujo emocional y adaptabilidad.
- Gas (al consumirse): Aire, aliento y comunicación.
Intencionando la Luz
Al encender una Vela, no se trata solo de generar luz.
Se trata de invocar energías, intenciones y propósitos.
Visualiza tu deseo en tu Tercer Ojo, siente su esencia y luego, proyecta esa visión en la Vela antes de encenderla.
Si estás interesado en combinar esta práctica con la Guía Angelical, te invito a explorar cómo las Velas pueden trabajar en armonía con los Arcángeles.
Cada color de Vela puede resonar con un Arcángel específico, amplificando su poder sanador.
El Arte de las Triadas Angelicales para la Sanación
Adentrándonos en el misticismo de las Velas y su vinculación con los Arcángeles, surge una práctica ancestral: la Formación de Triadas.
Este acto esencialmente consiste en posicionar tres Velas en forma Triangular, siendo cada una de ellas una representación de un Arcángel específico.
La Vela principal, que simboliza la intención dominante, se coloca en la punta del triángulo, mientras que las otras dos, que complementan y fortalecen el propósito, ocupan la base.
1. Triada Angelical para el Perdón:
- Objetivo Principal: Perdón y liberación de culpas.
- Configuración:
- Vela Morada: Representa al Arcángel Zadquiel, invocador del perdón y la transmutación.
- Vela Rosada: Canaliza la energía del Arcángel Chamuel, fuente de amor propio y comprensión hacia otros.
- Vela Verde: Simboliza al Arcángel Rafael, maestro sanador y restaurador del equilibrio emocional.
2. Triada Angelical para la Prosperidad:
- Objetivo Principal: Abundancia económica y estabilidad.
- Configuración:
- Vela Naranja: Invoca al Arcángel Uriel, dador de prosperidad y guía hacia oportunidades.
- Vela Rosada: Conecta con el Arcángel Chamuel, fortaleciendo el amor por el trabajo y el deseo de abundancia.
- Vela Amarilla: Es el reflejo del Arcángel Jofiel, inspirador de creatividad y organización.
3. Triada Angelical para la Salud:
- Objetivo Principal: Salud física, mental y emocional.
- Configuración:
- Vela Verde: Llama al Arcángel Rafael, protector de la salud y el bienestar integral.
- Vela Blanca: Evoca al Arcángel Gabriel, portador de paz, serenidad y claridad mental.
- Vela Azul: Enlaza con el Arcángel Miguel, defensor contra enfermedades y malestares.
Al encender cada Vela en estas Triadas, invitas a estos poderosos Arcángeles a actuar en tu vida, canalizando sus Energías específicas para abordar y mejorar la intención deseada.
Es una danza mística de Luces y Energías que, al unirse, crean un espacio sagrado de sanación y renovación.
Te animo a explorar este camino luminoso y a descubrir el potencial que reside en ti y en el universo.
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